viernes, octubre 03, 2008

Antojos raros



No sé con seguridad cuando exactamente dejas de pasar de las típicos e inofensivas rutinas de echarte un Bubulubu, un Pelón Pelorico o una bolsita de Krankys que por supuesto venden en cualquier tiendita de la esquina a volverte fan de ciertas delicias de fina reposteria francesa, de las cuales confieso ser fan desde hace un par de años.
Y aunque todo fue culpa de una amiga quien me dio a probar uno de estos deliciosos "macaroons", tengo que reconocer que cada una de estas galletitas tienen su historia y son prácticamente famosas desde principios del siglo pasado, se podrían clasificar como un postre francés completamente artesanal, sus sabores son variados y van por temporadas.
Sí, como si de por sí no fuera suficiente que te los traigan de Paris o Londres donde son vendidas y creadas por las famosísimas tiendas Ladurée o tengas que pagar una buena lana en Euros para saborearlas, sino que dependiendo de la estación encontrarás una selección diferente, desde limón, pistache o avellana, hasta los estravagantes pétalo de rosa, lily del valle o durazno con gengibre, entre muchos otros... La verdad saben a gloria y lo único que puedo decirles es que definitivamente, valen lo que cuestan, yummy!